Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de junio, 2017

Quedar contigo

Apenas hace un mes que ha muerto mi madre, y me encuentro en la cafetería de la Facultad, tratando de verla por última vez antes de que el verano nos separe quizá definitivamente. Al entrar por la puerta , ella es lo primero, o quizá lo único que veo. Hablamos largo rato, y a cada momento deseo pedirle que nos veamos por la tarde, y a cada momento no me atrevo. Si se lo pido, estoy seguro de que iremos construyendo un futuro juntos; estoy seguro de que pasearemos muchas tardes por el Madrid de los Austrias. Seguro que me acompañará por los momentos duros de mi vida, que me hará sentir único, amado, deseado, especial. Pero no me atrevo a pedírselo. Si se lo pido, estoy convencido de que en nuestra boda leeremos a Benedetti, el Principito, a Neruda. Iremos a conciertos de Ismael Serrano, a pequeños cafés donde nos amaremos, o nos dejaremos infinitas veces. Pero no me atrevo a pedírselo. Seguro que sí se lo pido, llegare tarde a esta cita, y ella me estará esperando como yo llevo toda la

Vivir

Aun me quedan muchas cosas por querer hacer en la vida. Pero ya no me obsesiona como antaño si las podré realizar o no. Al fin y al cabo , poco le importará a ese mí que ya no seré cuando muera. Poco le importará si visité París o aprendí violin. Así , libre de metas y objetivos, solo me queda vivir.

Túneles

Un día como hoy, hace veinte años, un joven estudiante se dirigió a la Facultad en el ultimo día del curso . Eran los días más oscuros de su existencia, días llenos de dolor y de sinrazones, de preguntas sin respuesta. La vida era un túnel oscuro, sin luz al final que le hiciera albergar esperanza alguna. Aun así , acudió a la Facultad con la esperanza de volverla a ver, sintiendo que le iba la vida en ello. Y allí la encontró , irradiando una inmensa luz, dándole sentido a todo. Se acercó a ella, temblando como un junco batido por el viento, armandose de valor , aferrando se a su corazón cual naufrago al ultimo madero del barco. Con la osadía que da el fermento de cebada, le preguntó con el alma ,que no con los labios, si querría pasar esa tarde con él; no supo si la respuesta se demoró, o si el universo se detuvo, pero al cabo de una eternidad,escuchó un sí, y descubrió una luz al final del túnel . Horas después, montó en un vagón de metro, para iniciar un viaje aún inconcluso de

Películas

Reniego de las películas de acción que recurren a la violencia gratuita y de las que necesitan explicar una relación amorosa con sexo casi explícito . No necesito ver las vísceras de un tío  por toda la pantalla para saber que está muerto ni a dos follando para saber que tienen una relación. La mayoría de estas escenas de películas vacuas no aporta nada a la trama argumental. Me aburre este cine .

Dolor

Celebraré hoy que me duele algo el cuerpo pero nada el alma. Que hay días mejores y peores, pero hay. Celebraré que no te merezco. Que no hay dolor que no calmen tus caricias en mi espalda. Que mi fragilidad se hace fuerte entre tus brazos. Celebraré que vivo aunque duela. Que no hay miedo a la noche y sus sombras si es tu voz la que me despierta cada mañana.

Un niño

Hace tiempo conocí a un niño, asomado a la ventana de su cuarto en la ultima planta de un bloque de un barrio de Madrid. Desde allí, en los dias despejados, veía a lo lejos la silueta de la sierra, y así, mirando al lejano horizonte, soñaba con el futuro que habría de llegar. Ese cuarto era su refugio, y esa ventana era la metáfora de sus ilusiones. Aprendió a ser feliz fuera cuales fueran las circunstancias de la vida ; muchas veces fue egoista y cobarde, quedándose en la calle hasta que la luz de la habitación de su padre se apagaba. Entonces subía a casa, pasaba de largo y se encerraba en su cuarto, dejando a su madre en el salón , sola con su pena, con su dolor, su frustración. Hace tiempo conocí a un niño, que fue feliz, como los son los niños, agarrado a las faldas de su madre, protegido bajo el ala de su amor incondicional. Ya no está su madre, pero hay otras faldas. Le sigo viendo casi a diario.

La maleta

Le costó tomar la decisión. No por él. Por él había renunciado a su vida. Por él había cambiado de vida. A él se la había entregado en cuerpo y alma hasta hoy. Una vida plena y feliz en los primeros años, fruto de cuyo amor incondicional nacieron sus hijos. Pero se había cansado ya de seguirle por todos los bares, de acompañarle por los suburbios del alma, por las cloacas del amor. Sus hijos ya no la necesitaban , hacía tiempo que habían huido de la pesadilla. Una mañana , en la eterna soledad de su casa, abandonada a su suerte una vez más, sola , sin explicaciones, decidió marcharse para siempre. Abrió el armario y cogió lo imprescindible. Se llevó el amor en la maleta. Cuando llegó a su destino, la ropa y el corazón aún olían a él.

Junio

Junio me trae multitud de olores que inundan mis recuerdos. Olor a inicio de aquellas vacaciones escolares , eternas , incluso tediosas al fin. Olor a fin de temporada en el equipo de fútbol, con sus éxitos o fracasos. Olor a tomillo y jara en el pueblo en verano. Pero también olor a hospital, y a ropa por tirar,ropa ya sin dueña a la que vestir. Olor a silencio y soledad. Olor a miedo. Y por encima de todo, olor a universidad. Olor al camino que lleva del Clínico a la facultad a través de la Complutense. Olor a aquel paseo de un sitio al otro para ver si se daba la casualidad de verla antes del final del curso. El olor de mi miedo a oír un no saliendo de sus labios , el miedo a comprobar que sus ojos no eran para mirarme a mí. El olor de la ilusión de vuelta a casa pensando que un sí había dado pie a una cascada de ilusiones y de emociones hasta volvernos a ver esa misma tarde. Por fin , el olor de su piel inundando mi boca, el olor de sus manos acariciando mi cuerpo. Olor a

Comunión

Son hitos que nos marcamos las personas para marcar los recovecos de nuestras vidas desde tiempo inmemorial. Hoy la vestiremos de princesa y será el día mas importante de hasta ahora su corta vida. Qué importan hoy mis no creencias , si lo que de verdad importa es su cara de ilusión. Son niñas y deben seguir con sus sueños; me  ha dicho muchas veces que no quiere crecer, y no me extraña. Un día, mi gran amigo Jaime Mariño me explicó la filosofía de vida de otro amigo deportista; me dijo que el deporte te enseña a perder, porque la vida es basicamente perder. Pierdes la infancia, la juventud, despues los padres y amigos, y por fin , acabas perdiendo tú mismo la partida. Por eso quiero aferrarme a cada sentimiento de mi vida, y perder cuanto más tarde mejor su infancia. Pero dias como hoy me van avisando de que mi derrota se avecina. La vida...... ( vámonos de Comunión

La mar

El mar, la mar, era el sueño de un niño que apenas podía disfrutarlo; era la metáfora que resumía sus sueños. Ahora me proporciona la reflexión, la tranquilidad de la quimera alcanzada. Ahora ellas se adentran en la inmensidad del mar, de su mar, iniciando su propio camino que se aleja del mío . Y lo hacen despacio, con la tranquilidad del que nada teme, con la seguridad del que sabe perfectamente hacia donde va.